Un excepcional diamante amarillo fue vendido en Ginebra por más de US$12 millones. La joya de 110 quilates, llamada "gota de sol", fue vendida a un pujador anónimo. El diamante ha sido descrito como el más grande y el más perfecto jamás subastado.
Las casas de remates de la ciudad han estado efectuando sus ventas anuales de joyería y disfrutan de un vigoroso negocio.
Entre las joyas exhibidas en la filial de
Sotheby's en Ginebra se incluyen una esmeralda de 12 kilates, un anillo
de diamante rosado y tres diamantes azules.
Un representante de la casa de subastas, David
Bennett, indicó que el monto pagado por el pujador vía telefónica y que
prefirió el anonimato, impuso un nuevo récord como la mayor suma pagada
por un diamante amarillo.
El diamante fue descubierto en Sudáfrica el año pasado y fue vendido por la empresa con base en Nueva York Cora International.
La piedra preciosa fue certificada por los
gemólogos como "un amarillo vívido de fantasía", el color más raro y
deseable por aquellos que buscan un diamante con esa particularidad,
según indicó Sotheby's.
El color amarillo es el resultado de trazas de
nitrógeno atrapadas en moléculas de carbón y endurecidas en el curso de
millones de años.
El diamante tuvo un valor estimado antes de su
subasta de entre US$11 millones y US$15 millones. Sumando comisiones e
impuestos el precio final de venta fue de US$12,36 millones.
"Es un récord para un diamante amarillo... pasó
exactamente lo que esperábamos para esta espectacular piedra", dijo
Bennett a los periodistas poco después de la subasta.
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